Una Vida

07 octubre 2010

Odio mi vida. Sí, como leéis, la odio. Hay días que sería mejor que ni me levantara de la cama pero no, soy muy cabezota y como tal me levanto, o también puede ser que el perro, desde esa esquina de la habitación, con su cara triste, me haga chantaje para que me incorpore, me vista y le baje a la calle.

Ya estoy despierta. Ya estoy vestida. Ya... ya no puedo volver a la cama (aunque quisiera).

Hoy es uno de esos días, bueno hoy y ayer, y antes de ayer, y el fin de semana.... no acabaría. Es un año malo, muy malo y esos momentos en los que parece que nada puede ir peor, zas, te tropiezas y vuelves a caer, cada vez más profundo. Una caída libre sin paracaídas y sin freno.

Estoy cansada de levantarme, de mostrar esa sonrisa que... cada día aparece más tarde y que el brillo de mis ojos ha desaparecido siendo sustituido, más a menudo, por la lágrimas que van pudiendo conmigo.

Una pregunta ronda mi cabeza y no la puedo hacer acallar, ¿por qué? Pero la respuesta es sólo un eco sordo del silencio que la puebla.

Necesito un cambio. Necesito que por una vez, sólo una vez, la Señora Suerte llame a mi puerta y me diga: Ya es tu hora. Es tu momento.

Ding Dong

-Perdonad, creo que llaman....

Propiedad Merche Diolch ©

7 comentarios

  1. juer... me has angustiado con el microrrelato... ains... chica te las apañado para hacerme tragar saliva mas de una vez... vamos... te ha quedado cojonudo!

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  2. ¿Has oído el refrán "No hay mal ni bien que cien años dure"? Pues es bastante cierto. Si algo he aprendido a lo largo de los años es que la felicidad y el "estar bien" nunca están completas. Siempre falta algo. La sensación de caída libre es bastante frecuente y no podemos esperar que la solución esté en una sola cosa. Me parece que vivir es eso, luchar, levantarse y aprovechar cualquier oportunidad que se presente para sonreír. Y, por supuesto, salir a abrir cuando llamen a la puerta. Por si acaso ;)

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  3. Y sin no es la señora Suerte, la que llama a tu puerta, tiene un amiga que se llama Esperanza y viene todos los días con la mañana. Así, que ¿a qué esperas, para abrir? Un beso, Ana.

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  4. La señora suerte, a mi parecer, no existe. La vida va de lo que nosotros hagamos con ella... tal vez aveces si se presenten oportunidades que tocan a nuestra puerta sin ningun motivo, pero ¿suerte? no lo se... Igual, levantarse es un buen paso. Yo, no lo hago, y dejo que todo se derrumbe... y lo vuelvo a hacer una y otra vez.

    Un besazo con bigote de leche!

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  5. Merche, no pienso decirte ni mu de este micro, porque prefieron estirarte de los pelos. Ya sabes lo que hay que hacer.
    Besos

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  6. Inquietantes palabras. Espero que no tengan nada que ver con la realidad.
    De todas formas, pienso que la suerte (si se desea llamarla de ese modo) siempre llama a la puerta de la gente que la busca con tenacidad.
    Un beso y ¡suerte! ;)

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  7. Gracias por pasaros chicas. Fue sólo un bajón, ya ando bien pero ¿a que ha salido un micro chulo?
    Muchos besitos a todas :D

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