Balance del año 2014

Ahora que por fin puedo arañar unos minutejos al día para sentarme con tranquilidad delante del ordenador creo que ha llegado el momento de hacer balance del año que dejamos.

Y aunque al principio dudaba si hacerlo o no porque entre nosotros no ha sido uno de los mejores, al final unas pocas personitas facbookianas me han recordado que ha habido grandes momentos.

Primero, hay que buscar una palabra que describa con precisión este año que dejamos...

El 2014 ha sido para mí...

UN VERDADERO CAOS

Vieron la luz dos novelas cortas mías, en papel:

¿Por qué no? y Fuego Rojo

Una de ellas, la del cupcake (me encanta llamarla así), cruzó el charco y eso fue FANTABULOSO.

Hubo presentaciones, firmas y asistí a algunas ferias de libros como la de Madrid (creo que es el sueño de cualquier escritor o por lo menos el mío).

Después llegó la publicación en digital de las dos novelas:

    

Y así mis pequeños pudieron llegar a más gente, mucha más gente.

Colaboraciones en antologías, y en algunas cambiando de registro y alejándome de la romántica.

  

  

Una montaña rusa a nivel profesional donde incluso una de las obras que más cariño tengo volvió a casa casi, casi por Navidad (prometo que pronto habrá GRANDES noticias de esto).

Fue una locura...

Locura con la que aprendí mucho a nivel profesional y a nivel personal, ya que pude descubrir quien está a mi lado para lo bueno y para lo malo. Ufffffff... casi parece que estamos de boda.

Y Locura porque me embarqué en DOS NUEVOS Y GRANDES PROYECTOS (sí, lo sé, ya no me queda tiempo ni para respirar):

1. A nivel literario, junto a dos grandes amigas y una tercera que andamos liándola... ejem... quise decir convenciéndola.

2. A nivel local porque cuando quieres que las cosas vayan bien es necesario levantarse del sofá de tu casa y hacerlas por ti misma.

La culpa de ello: la experiencia vivida en el 2014.

Y el resultado, que espero que sea muy positivo, tendrá su fruto en el 2015.

Solo me queda desearos un: